AGA-CAW es una asociación sin ánimo de lucro cuyo objetivo es unir esfuerzos para el desarrollo y bienestar social y así garantizar la igualdad de género de los grupos más vulnerables socialmente. Esta asociación fue fundada en Barcelona (España) el 9 de noviembre de 2010 con el nombre de NAGA (Niños Afectados por la Guerra en África), por un grupo de amigos conocedores de las precarias circunstancias del África occidental. Surgió con la idea de concienciar a los países desarrollados sobre las necesidades básicas de las personas más desfavorecidas.
En una entrevista informal en julio de 2010 con la asociación “Children Assistance welfare” (CAW), asentada en Freetown, capital de Sierra Leona, pudimos comprobar la existencia de este problema. La asociación CAW fue creada el 10 de julio de 1993 durante la Guerra Civil que afectó a dicho país por un periodo de más de 10 años. Vimos con nuestros propios ojos cómo la asociación estaba a punto de quedar en el olvido dejando los proyectos emprendidos a medio terminar. Nos dimos cuenta de que las promesas en la mayoría de los casos no se cumplen o, por lo menos, no en su totalidad. Desde entonces, nos hemos comprometido de forma altruista a dar a conocer la precaria situación de estos colectivos más necesitados que, aunque ya no sean tema de interés para los medios de comunicación, siguen necesitando nuestro apoyo.
Teniendo en cuenta que han transcurrido muchos años desde el fin de la guerra civil en Sierra Leone, y con el deseo de incidir de una manera más amplia en la realidad actual del país, hay una voluntad de dejar de mirar hacia el pasado, y empezar a transformar la sociedad de Sierra Leone desde el presente.
Por ello, invitamos a todos aquellos que consideren que todavía hay mucho por lo que luchar tanto profesionales como particulares, instituciones gubernamentales y privadas- a unirse a nosotros con una mínima aportación con la que poder colaborar en diferentes proyectos, que pueden contribuir a la transformación individual y social, en una diversidad de ámbitos, especialmente el educativo, imprescindible para el desarrollo del país en el que viven estos colectivos marginados.
